Kung-fu caspa, parte 1

¿Kung-fu caspa? Esa es la pregunta que me hacen mis amigos justo después de descojonarse vivos cuando les hablo del género. Pues bien amigos, kung-fu caspa es lo que aquí llamamos serie b, aunque esto es dentro del género de las artes marciales. El kung-fu caspa engloba todas aquellas películas hechas con nulo presupuesto, actores malos e historias peores aún y que suelen tener sólo cinco sonidos que repiten hasta la saciedad: espadazo (que se aplica a los palos también), golpe con la mano, golpe con la pierna, parada de golpe y movimiento de ropas, que usan para saltos, movimientos marciales, mortales, etc (que suena como una gran tela enganchada en un palo movida por un fuerte viento)…

Pues, como soy amante del género (todavía no sé muy bien el por qué), os voy a comentar en dos artículos varias peliculillas de este género, algunas buenas, otras malas y alguna que otra que no debería ni existir.

Para esta primera parte he elegido Li cuello de acero, El dragón y el joven maestro, Los 13 golpes mortales del kung-fu y Los ojos del dragón.

Li cuello de acero. Es bastante extraña y con explicaros dos cambios de escena, creo que será suficiente para que me entendáis (porque todos son iguales).

La escena es dentro de un bar y termina con un tío cayendo al suelo al lado de Li. A la mitad de la caída, cambian la escena y Li está en el exterior.

En otra escena, está hablando un príncipe en el mismo escenario que Li, de repente enfocan a éste y resulta que está hablando con el príncipe, que lleva una ropa distinta que en la escena anterior, y están en otro lugar. Pero todo seguido como si fuese la misma escena... pero bueno...

Se podría decir que la película, dentro de las artes marciales, es de serie b por lo cutre que es. Y, excepto por los bruscos cambios de escena, la película está bien. Es entretenida y tiene buenas luchas.

A todo aquel que le guste este tipo de peliculillas, no se puede perder esta.

El dragón y el joven maestro. Empezaré diciendo que me llevé una sorpresa con esta película. Parecía que era de las malas la peor, pero resultó ser muy entretenida (aunque la historia no sea muy buena que digamos). Los elementos principales de esta peli son un mapa del tesoro, una panda de malos que dan un poco de risa, un justiciero llamado ninja de plata al que le sale un competidor (que es también un ninja aunque sólo hay chinos en la peli…), un prota con greñas que se parece y grita como Bruce Lee, miles de posturitas de artes marciales que no vienen a cuento (en primer plano ves a dos tíos luchando y en el fondo están un puñado de tíos haciendo posturas y moviéndose como para rellenar hueco), buenas luchas y un final que incluso en este tipo de películas es raro…

Mi consejo: tenéis que verla pero con un buen bol de palomitas y unos refrescos. No lo lamentaréis.

Oh, se me olvidaba, también sale un viejo ciego que tiene los ojos maquillados (¿?) y que lucha muy bien. Personaje curioso donde los haya, jejeje.

Los 13 golpes mortales del kung-fu. De esta película sólo debéis saber tres cosas: que es aburrida de cojones, que las luchas son bastante cutres y que no hay ninguna técnica que se llame los 13 golpes mortales (aunque por el título parece que haya una). Además, la mayoría de las luchas están puestas a cámara rápida, lo cuál hace que las ya de por sí ridículas peleas lo sean más aún. Alejaos todo lo que podáis de este subproducto de las artes marciales. Y si os decidís a verla, luego no me culpéis a mí, porque ya os avisé XD.

Los ojos del dragón. Va de unas mafias intentan hacerse con una fórmula que ha inventado un científico ruso. La CIA intenta recuperar esa fórmula y salvar a la hija del científico. El malo malvado de la película es un ninja norteamericano, y el bueno, que pertenece a la CIA también es un ninja norteamericano (WTF?). Hay luchas de por medio, efectillos cutres pero que te hacen reír, unos “actorazos” bastante pobres en interpretación y un guión parido por un mono ciego...

Creo que no me hace falta decir que es imprescindible ver esta película (sólo recomendada a aquellos que les guste el género).

Pues ya sabéis, si queréis arriesgaros a ver alguna de estas joyas, adelante. Pero recordad lo que os he dicho: ¡no me hago responsable de las posibles lesiones cerebrales irreversibles que podáis sufrir durante su visionado!

¡Un saludo y hasta la segunda parte!